La artista sueca luchaba contra un cáncer cerebral desde 2002. Tenía 61 años
La cantante Marie Fredriksson, integrante del grupo Roxette -que conformaba junto a Per Gessle-, murió en la mañana de este lunes 9 de diciembre en Suecia donde luchaba desde 2002 con un tumor cerebral. La artista tenía 61 años. La información fue confirmada por su gerente de prensa, Marie Dimberg. “Con gran tristeza tenemos que anunciar que uno de nuestros artistas más grandes y queridos se ha ido. Marie Fredriksson murió en la mañana del 9 de diciembre en las suites de su antigua enfermedad“, escribe Marie Dimberg, contacto de prensa y gerente de Roxette y Golden Times en un comunicado de prensa.
La enfermedad en Fredriksson fue descubierta el 11 de septiembre de 2002 cuando “comenzó el infierno” según las propias palabras de la compositora. Según relató, todo comenzó de manera paulatina. Primero empezó a olvidarse las letras de sus propias canciones. Hasta que una mañana se desmayó en su propiedad y se encendieron las alarmas. Cuando se despertó estaba en un hospital y le dieron la dura noticia: tenía cáncer cerebral.
Gessle, por su parte, emitió un comunicado lamentando la partida de su compañera de éxitos desde 1986. “El tiempo pasa muy rápido. Parece que hace poco cuando Marie y yo nos sentamos en mi pequeño apartamento en Halmstad y compartimos sueños. ¡Y qué fantástico sueño tenemos para compartir! Gracias Marie, gracias por TODO. Eras una música verdaderamente única, una cantante en un nivel que casi nunca volveremos a experimentar. Pintaste mis canciones en blanco y negro con los colores más hermosos. Fuiste una amiga maravillosa por más de cuarenta años. Estoy orgulloso, honrado y feliz de haber compartido tanto de tu tiempo, tu talento, tu calidez, generosidad y humor. Todo mi amor por ti y tu familia. Las cosas nunca serán lo mismo“.
Los médicos creían que la cantante no iba a sobrevivir mucho más que un año a partir de entonces. Sin embargo, sorprendió a todos. Tuvo que enfrentarse a una gran dosis de medicamentos, sesiones de radioterapia, complejas operaciones. Pero, a pesar de la supervivencia que experimentó, las secuelas en su cuerpo eran evidentes. Experimentó, en estos 17 años, problemas en el ojo derecho, auditivos, motores, de orientación y memoria. En 2007 volvió a los escenarios.
“Pasé trece años de mi vida bajo el estigma del dolor, pero nunca me di por vencida y no me voy a rendir. Voy a seguir peleando hasta que no pueda más. Fue un milagro que sobreviviera. Si uno no pasó por esto, no puede entenderlo“, señaló Frederikson en el libro Listen to My Heart -título en honor a uno de sus mayores éxitos musicales- escrito por la periodista Helena Von Zweigbergk. “Las dificultades de la vida no terminan nunca. No se puede vivir sin dolor“.
Junto a Gessle, Roxette ha vendido 75 millones de discos y cuatro de sus singles llegaron al Nº 1 en el Billboard de los Estados Unidos y fueron la primera banda de habla no inglesa en grabar un unplugged para MTV. En 1986 grabaron su primer sencillo, Neverending Love, el cual estaría incluido en su primer álbum Pearls Of Passion. El sencillo fue el primer Top Ten del dúo en su país natal, dando paso a posteriores ediciones de singles que lograron éxito similar. El primer álbum de Roxette logró el éxito local que los llevó a vender más de 200.000 copias en Suecia.
Fredriksson nació el 30 de mayo de 1958 en el sur de Suecia, comenzando su carrera musical en la cercana Halmstad, donde se hizo amiga de su futuro compañero de Roxette. Después de un exitoso debut en solitario en 1984, la cantante se convirtió en uno de los artistas más queridas y exitosas de su país. En 1986 iniciaron junto a Gessle su plan más ambicioso: trascender las fronteras y juntos comenzaron un viaje histórico que en los próximos años los convertiría en uno de los actos pop más grandes del mundo.